El
16 de junio de 1955 la Plaza de Mayo se convertía en escenario de un
cruento bombardeo aéreo que dejó más 350 muertos y dos mil heridos, y
que fue perpetrado por oficiales de la Marina y la Aeronáutica, quienes
en un intento de asesinar al entones presidente Juan Domingo Perón,
descargaron 14 toneladas de explosivos sobre el centro de Buenos Aires.
Resultó la jornada más sangrienta del siglo XX en la Argentina, y marcó
el inicio de un espiral de violencia política que se extendió hasta bien
entrados los años ’70.
(envío original lunes, 22 de junio de 2020, 13:10)